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Tevo Taré
(correo electrónico, 06-06-2006)

Ya están aquí. ya llegaron las oposiciones de
secundaria otra vez. Se comienza el día 23 y se sigue el
29. No ha acabado el curso y ya empezamos con el baile. Para acceder
a un puesto de trabajo cuyo sueldo se puede congelar arbitrariamente
y con un reconocimiento social menoscabado por los efectos de la
ESO. Es más contrariamente a la verdad, debe haber una leyenda
urbana que ejemplifica al profesor español como quien trabaja
menos en Europa, seguido de un sueldo importantísimo. No
será que es personal altamente cualificado, con horas no
lectivas y un sueldo de la glaciación anterior al euro y
poco más. Pero
hablemos del baile: ¿Es una selección de personal?
Si, claro que sí. Al profesorado interino o fijo (de tribunal
o no), se le pide las buenas prácticas en su trabajo en las
que entra un proceso de enseñanza- aprendizaje significativo.
Pero es curioso, o más bien erróneo, el basar el orden
de los aspirantes a una plaza, en un totalmente examen memorístico.
Y mi reflexión, es la siguiente: En cualquier otro tipo de
selección, en la Junta de Extremadura, veo como se hacen
exámenes tipo test, (no hay que desrrollar tema).
En otras consejerías se puede llegar a un acuerdo de estabilización,
como
en sanidad, pero en enseñanza no parece ocurrir.
Recuerdo exámenes como el MIR, PIR, FIR, etc. Los médicos
y el resto del
personal de sanidad, el cual tiene la vida de muchas personas en
sus manos; superan una prueba tipo test. Esta es objetiva, sobre
un gran temario, exenta de la suerte de saberse sólo el tema
que salga; y que constituye el paso previo al acceso a un período
de prácticas. Por ello propongo desde aquí a los ojos
que me lean, la posibilidad de una prueba similar y un pequeño
período de prácticas, lo suficiente para que sea justo
y no suponga un gasto excesivo a la consejería. A propósito,
ya existe un período similar una vez aprobadas las oposiciones,
con plaza (que esa es otra, se puede aprobar sin plaza y vuelta
a empezar). Se limitaría quizás a
unas horas de apoyo a las clases de otro profesor del mismo área
o en su
defecto al jefe de departamento, o acreditación de tres años
de experiencia mínima como interino, o sólo ¿por
que no?, de haber superado el curso del CAP (curso de aptitud pedagógica).

En
otras empresas privadas, como son centros educativos de mínimo
igual
prestigio, se establecen selecciones de personal a modo de entrevista.
Esto demuestra que auque en la empresa pública no se debe
contratar a dedo, el aspirante a profesorado ya cumple unos requisitos
mínimos sobrados para tal fin; tal es así que una
entrevista dan buen resultado en el sector público. Ya que
un opositor (quizás interino un año y al otro también)
obtiene un Título Universitario, después realiza un
Curso de Aptitud Pedagógica, cuanto antes mejor, no sea que
lo vuelvan a alargar.
Con el primero demuestra tener un nivel de conocimientos y procedimientos
superiores a los que se pueda impartir. Si no se piensa ésto,
se pone en duda la Universidad en España y con ella sus títulos,
los cuales deben ser, y lo son, imprescindibles en los requisitos
de esta selección. Con el segundo, el profesional se adapta
al trabajo de profesor en un ámbito determinado, siempre
introduciéndose en el proceso de enseñanza- aprendizaje
desde el punto de vista del aprendizaje significativo, continuo,
fijando mínimos y orientado. Pero lo primero que se le pide
es que es desarrollar un tema de memoria, es decir, se le pide al
opositor que memorice unos 70 temas. ¿Sólo me choca
a mí?, o lo mismo piensa la mayoría del personal de
enseñanza.
El año que viene volverán los maestros. Y en este
caso como en el actual, queda patente que un título universitario,
orientado a la enseñanza no es suficiente si no se memoriza
totalmente un temario.
Sí el personal seleccionado es de buena memoria, además
de conocimientos-reglados, ¿No es de esperar que tienda a
exigir una elevada memoria y no razonamiento-procedimiento? Con
el presupuesto actual, puede que sea un profesor de Educación
Física pero acabe completando horario con Tecnología,
que no es como saber Inglés y completar con Francés.
¿Hay algún planteamiento de Calidad que se preocupe
de esto? ¿Qué profesionales futuros estamos creando?
Observo, que hay pocos premios Nobel en España. No importa,
pero menos
habrá; demuestra que hay una tradición de burocracia
reglamentada, en contra de la eficacia y la investigación,
la cual obliga a pasar años y años en la enseñanza
como alumno para terminar sólo en una prueba memorística.
¡Cómo después de perder tantos años de
mi vida voy a dedicarme a mejorar mis conocimientos, investigar
o hacer más cursos sobre mi trabajo! Existe una época
de obtener conocimientos y títulos, otra de trabajo y en
algún momento debo disfrutar la vida, viajar o estar con
mi-s hijo-s, esa otra parte de mi vida descuidada cuando memorizaba
el temario de las «opos». Sr. Jefe de estudios no me ponga
tutorías
impagadas y déjeme un horario para entrar tarde y salir temprano
¿Es reprochable que alguien con esta vida piense así?,
¿después de ver como el temario de enseñanza
hay que bajarlo porque es demasiado pedir a un alumno (profesional
futuro)?
Después de todo aquí sigue siendo uno de esos lugares
donde aún no se han cerrado las listas de interinos, y mucho
menos te van pedir el idioma local.
Ya está bien de cambiar continuamente, según las elecciones
generales, las pretensiones del plan educativo. Vamos ha hacer una
buena selección de personal y que los integrantes decidan;
entre ellos me parece que debería haber algún profesor
en activo.

Fdo:
«Tevo Taré»